Para Javier
Clarín
que a fiesta llama
Redoblando
melodías
Ubérrimas
de aquel tiempo,
Zarpazo
a la Humanidad.
Días
llegados, estos son,
En
que corrales y plazas
Mezclan
gozo y bienestar
Alrededor
de la Cruz,
Y así
poder ver la Luz
Otro
nuevo comenzar.
¡¡¡PRECIOSO!!!
ResponderEliminarEsto me llega a los tuétanos ¡Aquellos corrales, vivían con alegría, compartían nuestras más queridas tradiciones!
Yo llegué a conocer algunas, la más cercana, en la calle Feria, 183, siendo muy niña y bailé sevillanas con mi amigo Jesús de la Rosa, del conjunto, Triana, (cantaba mejor que bailaba), dicho sea de paso ¡Qué buena gente había por allí!
Me has traido bonitos y buenos recuerdo y el lamento por lo que hemos perdido...
Un besillo.
M.C.
Todo correcto, y acerca de Jesús que razón tienes aun recuerdo un baile por sevillanas, cómo diría un Trianero: "pa mearse de la risa". ¡Ay, aquellas casas de vecinos de los años 40-50! Allí si que había familiaridad. Se moría un vecino y parecía que se había muerto alguien de la familia. Y la copilla de aguardiente por la mañana cuando llegaba un vecino/a celebrando su Santo o cumpleaños... Te fuiste y no regresaste//que mala suerte tuviste//que pena no poder quedarte. Hala pa tus memorias. Otro besillo "macareno" ea
ResponderEliminarJeeeeeeeeeeee... sobre las sevillanas que bailaba, eso lo diría un trianero y una macarena, miarma...
ResponderEliminarSu madre, Concha, una santa, y una familia estupenda ¡Qué pena, se marchó en la flor de la vida y en pleno éxito!
No recuerdo haber visto a José Luis, Emilio, a tí... yo era más chica que Jesús, pero iba mucho por Triana...Bueno, ¿quién se iba a fijar en una cría con trenzas y traviesa? Jeeeeeeeee...-