PUENTE DE TABLAS Y PASADERA DEL AGUA

           Tras la construcción del Puente de Triana (1852) relevando al ya hartamente fatigado Puente de Barcas que fuera construido y remozado continuamente desde 1171 hasta esa fecha, Sevilla debe una pequeña parte de su importancia a esta parte del río en que aguas abajo era posible cruzarlo.

           Sería el 23 de Abril de 1898 cuando por la perentoria necesidad de resolver la traída del agua desde el Aljarafe, se construye e inaugura en 1904 una pasarela que cubriría dos funciones: la de soportar las canalizaciones para el agua, y la de servir como pasarela peatonal aliviando con ello el paso hacia Sevilla desde Chapina. Esta pasarela conocida como “El Puente de Tablas”, sería construida en hierro y proyectada por los ingenieros Friend y Escobar, siendo financiada la obra por la Compañía “The Seville Water Works Company Limited” tras el favorable resultado del informe demográfico-sanitario realizado por el Dr. Hauser en 1882. Su demolición y desguace se produciría en 1959.

        Años antes, se habría aprobado el proyecto de otro puente. En este caso se trataría del que fuera denominado Puente de Alfonso XII, también de hierro dado el auge que habría tomado este tipo de construcción, el cual habría solucionado un grave problema existente; este era el que tras el estudio de abrir una vía para el Ferrocarril Sevilla-Huelva, y al encontrarse el Guadalquivir por medio se hacía inviable; problema que quedó resuelto tras la inauguración el día 15 de marzo de 1880. Estaría en servicio hasta que en el año 1943 fue desmontado y desguazado para ser sustituido.