TRIANA

                                                LA CATEDRAL DE TRIANA

Se desconoce la fecha exacta en que fue bendecida, la que actualmente es Real Iglesia Parroquial de Santa Ana en Triana (Sevilla), en aquella época en que las hermandades y Cofradías de nazarenos comenzaron a realizar Estación Penitencial a ella, dado que no podían cruzar al otro lado del río, y que fuera mandada construir por Alfonso X, en 1276, en agradecimiento a la curación de una enfermedad que padecía en los ojos, y que el Rey “Sabio” estimó fue por la gracia de la Madre de la Virgen María.

Como quiera que en esa época el primer núcleo de población, alrededor del cual se construye la Iglesia, era eminentemente de origen gitano, bien es verdad que se le podría dar cierto crédito al Escritor y viajero George Borrow, ya que en su obra “Lavengro (Caló), el estudiante y el cura”, de 1835, o esa otra titulada: “El Zincali, o la cuenta de los gitanos de España”, cuando refiere las plegarias de esta etnia en acontecimientos religiosos.

No es descabellado el pensar que esta plegaria que a continuación se expone, fuera una de las que se rezaron en aquel acontecimiento:

                                                                 OR CREDO

                                                                 (El Credo)

Sarta lo chibelaron los calés de Triana

(El Credo dicho por los gitanos de Triana)

Pachabelo en Un-debel batu tosaro-baró, que a querdi el char y la chiqué; y en Un-debel chinoró su único chaboró eraño de amangue, que chaló en el trupo de la Majarí por el Duquenque Majaró, y abió del veo de la Majarí; guilló mulo y garabado; se chaló a los jacharis; bejado a las baste de Un De-bel barreá; y de oté abiará a juzgar a los mulés y a los que no lo sinelan; pachabelo en el Majaró, la Cangri Majarí bareá, el jalar de los Majaríes, lo mecó de los grecos, la resurrección de las maas y la ochi que no maréla.