LA CAPILLITA DEL CARMEN

AMOR ARTE LUZ COLOR

            Podríamos iniciar esta entrada al blog, diciendo que esta preciosa obra del más puro estilo Regionalista Andaluz, de ladrillo limpio, fue proyectada por Anibal González, con la colaboración del Ceramista Emilio García, a comienzos de la década de los años veinte del pasado siglo, y tras acabar el que dos años más tarde sería Pabellón de la Beneficencia, en la esquina de Calle Reyes Católicos con calle Arjona, y al que le seguiría el proyecto de la Capilla de Los Luises en la calle Trajano; toda una porción de sensibilidad Arquitectónica, que tal vez de esfumara por culpa de una siesta de verano.

            Pero no quiero divagar. Quiero centrarme recordando en esta pequeña a la vez que gran obra que, llamada por algunos desaprensivos “El Mechero”, nos trae a la memoria una letra de Pascual González, y que relativa al Cachorro, nos recuerda que Él, no ha visto nunca ni Sevilla ni Triana...

           Al igual que a Éste Cristo, a algún que otro Trianero, quiero presumir, le ocurre tres cuartos de lo mismo, pero al contrario. Los observo una y otra vez pasando ante la Virgen del Carmen y santiguándose, pero, nunca mirando hacia arriba con lo cual es muy posible que muchos no conozcan la hermosura de la Cerámica que la envuelve.

          Si hay algo en Sevilla que es intrínseco del Espíritu de Triana, es La Capillita del Carmen a la entrada del Puente, y cuya torre no podía estar rematada por otra figura veletaria que no fuera un Sereno, pues si ella guarda la Collación, él, posiblemente, la guardaba a ella...

 

 

 

 

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