A
lo largo de la historia el ser humano ha conseguido realizar o
contemplar grandes obras sin embargo, aquella mañana nos quedamos
realmente maravillados al contemplar el desplazamiento de una mole
que, con más de 1250 toneladas de acero, 168 metros de largo x 30 de
ancho, y a bordo de grandes estructuras flotantes, cruzaba el
Guadalquivir, tan sólo apoyada en un eje sobre aquella orilla en la
que fuera construido por los Dres. Ingenieros Juan José Arenas de
Pablo (1940, Huesca <Aragón>) y Marcos Jesús Pantaleón
Prieto (1955, León), ambos en la especialidad de Caminos, Canales y
Puertos. Fue realmente asombroso cómo, al llegar a la orilla
contraria con lo cual el puente quedaba cubriendo ambas márgenes,
sus dos enormes pivotes quedaban perfectamente anclados a cada una de
las dos plataformas previamente construidas para recibirlos.
Estos
ingenieros fueron los ganadores en un concurso internacional en el
que participaron con sus correspondiente diseños y proyectos 22
países, recibiendo el premio de la Convención Europea para las
Construcciones Metálicas. La obra financiada por Mapfre, y de ahí
el nombre oficial del puente, sería ejecutada por la unión temporal
de las firmas Auxini-Ensidesa, comenzando en la Primavera de 1989 y
quedando felizmente terminada a finales de 1991, siendo inaugurado el
23 de Marzo de 1992. Las obras de la Expo´92 habrían comenzado el 4
de Diciembre de 1987, para quedar inaugurada el 20 de Abril de 1992.
El
momento anecdótico que viviría en su girar sobre el Guadalquivir
este Puente de la Barqueta, sería el de haberse realizado al segundo
intento ya que el día anterior y debido a fuerte golpe de viento
cuando el puente se encontraba en medio del río, fue devuelto hasta
la orilla sin el menor daño.
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